El pasado mes de Octubre organizamos un viaje relámpago para poder conocer mejor como era el lugar de donde son autóctonos los burros miniatura.
Una vez llegados a Cagliari, la ciudad más importante de Cerdeña, nos planteamos como poder llegar a los lugares donde “quizás” podamos encontrar todavía algún ejemplar autóctono de burro Sardo.
Buscando, preguntando y con esperanzas, conseguimos llegar a “giara de Gesturi”, reserva natural donde se pueden encontrar los típicos caballos Sardos en libertad. Posteriromente encontramos un “elevamento di Asini”, Diana muy gentilmente nos enseño sus mascotas, 6 burritos sardos, y nos explico que existián dos tamaños de burro, el pariente cercano del miniatura y uno de un tamaño superior, aproximadamente 1 metro a la cruz
.
Siguiendo nuestras pistas y acompañados por nuestro libro-guía de Cerdeña, después de mucho tropezar y con mucha fortuna llegamos a ISOLA ASINARA. Esta pequeña isla del norte de Cerdeña, tiene una extensión de 20 km de largo por 6 km de ancho aproximadamente, hoy día está deshabitada pero es te pequeño rincón del Mediterráneo esconde una larga historia, fue campo de exterminio Austriaco en la primera guerra mundial, posteriormente fue una cárcel de alta seguridad Italiana, penal de aislamiento para presos especiales…., y hoy un parque natural paradisíaco donde vive en libertad una raza de burro, la cual no se encuentra en ningún otro lugar del mundo, el BURRICO BIANCO DI ASINARA.
Al parecre no esta muy claro el origen de estos animales, aunque la característica que los diferencia es su peculiar albinismo, lo que no permitía emplearlos en labores de trabajo por su dificultad para ver durante el día. Estos burritos salvajes, que son muy fáciles de ver y se acercan a la gente con gran amistosidad, son la joya de la isla, junto con sus cristalinas aguas y su espectacular paisaje. Por esto estan protegidos por el gobierno italiano como una especie en peligro de extinción.
Después de recorrer las maravillas que nos ofrece esta pequeña isla, por asesoramiento de unos historiadores especializados en fragatas romanas naufragadas que trabajaban en Asinara, llegamos a la “Foresta di Burgos”, una especie de “Arca de Noe”, para las especies autóctonas de la isla de Cerdeña, donde entre otras especies encontramos 2 grupos de burros sardos, los grises rallados característicos, y otro grupo de burros blancos de Asinara. Una inmejorable actuación para la conservación de especies autóctonas domensticas.
De regreso a España nos venimos con un buen sabor de boca, tras haber encontrado lo que queríamos, haber disfrutado de la grata compañía de estos burritos, nos preparamos para seguir buscando los antepasados de los burritos miniatura mediterráneos Americanos . La próxima Sicilia?.
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